Un señor cuya cara denota el abatimento de la conciencia, interpreta en su guitarra con libre torpeza algo que define como canción. Sus manos recuerdan garras. Infinitas líneas de zurco profundo cubren la articulada superficie, tal como se presenta en tantos seres trapo. Los hombres trapo, tienen la particularidad de absorber la mugre que desechan otros seres. Estos otros por lo general presentan manos que recuerdan franelas de gamuza genuina. Se podría suponer que estos seres deberían ser más agradables en su aterciopelada condición. Sin embargo muchos de ellos provocan rechazo. Suelen ser portadores de potenciales agresiones que son brindadas en la mayoría de los casos en el preciso momento en que el receptor de la agresión le confía la espalda.
A los hombres franela se los puede identificar fácilmente cuando saludan. Ofrecen su mano franela, siempreflácida, de débil fuerza. Los más pusilánimes despiden un sudor frío y pegajoso que suele quedar adherido a la mano estrechada. Mucho más adherido y difícil de extraer, cuanto más trapo es la mano semiapretada.
Otra característica es la similitud que suelen tener con algún animal que suele actuar de manera similar a la del ser en cuestión. Los hay roedores, reptiles, y los peores de todos, reptoides.
Por último, estos seres franela suelen encontrarse en todos los estratos, puesto que su condición se halla ligada más a su actitud, que a su condición social.
Todo esto no quita que no parecía una canción.
Tuviste sed.
A los hombres franela se los puede identificar fácilmente cuando saludan. Ofrecen su mano franela, siempreflácida, de débil fuerza. Los más pusilánimes despiden un sudor frío y pegajoso que suele quedar adherido a la mano estrechada. Mucho más adherido y difícil de extraer, cuanto más trapo es la mano semiapretada.
Otra característica es la similitud que suelen tener con algún animal que suele actuar de manera similar a la del ser en cuestión. Los hay roedores, reptiles, y los peores de todos, reptoides.
Por último, estos seres franela suelen encontrarse en todos los estratos, puesto que su condición se halla ligada más a su actitud, que a su condición social.
Todo esto no quita que no parecía una canción.
Tuviste sed.
Arlequín
3 comentarios:
y, es que vivimos en un mundo esponja,en donde Bob solo es un dibujito.
Ya es hora de que apretemos la esponja, retorsamos el trapo y con la franela de gamuza le pasemos blem a los muebles
ai!
Esto es pasarle el trapo a la interpretación.
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